Hacemos hoy un pequeño impass en el análisis de nuestro bien amado equipo para hablar de un tema que me vino a la mente revisando distintas webs a lo largo del día de ayer (ya sabéis, con eso de que ayer se jugó un partidazo). Y de paseo por FIBA Americas, con lo de Argentina y eso, me di cuenta de una cosa: el próximo miercoles arranca el Centrobasket y yo no tenía ni idea.
Parece mentira, pero Centroamérica es la región que más fuerza ha perdido en el panorama del basket mundial. La consolidación de Asia y la mina africana, unido a la presencia de Norte y Sudamérica junto con Europa, dejan el papel al centro del continente americano como, no ya la “hermana pequeña”, sino la “tía solterona” del baloncesto. Las cosas no están bien, ninguna selección apunta alto en las últimas temporadas a nivel mundial y ahora mismo, que uno de esos equipos salga a plantar cara en el panorama internacional se antoja complicado.
Sin embargo, veo que todo puede cambiar: si aquí toda una generación surgió desde la plata de Los Angeles (que sólo Jimenez y Garbajosa pudieron ver algo de aquel partido), tenemos que pensar en que estamos ante la reacción de, por ejemplo, Puerto Rico. En 1990, una generación mágica acabó cuarta en el Mundobasket de Argentina: los grandes referentes de aquel equipo marcaron una época en el basket del Caribe y en la ACB dieron mucho que hablar. Mincy, Piculín Ortíz y Ramón Rivas fueron jugadores por los que equipos españoles gastaban una plaza de extranjero en vez de apostar por un norteamericano.
En Centroamérica hay una gran tradición de baloncesto, y no tenerles en cuenta es faltarle el respeto a ellos y a nuestro pasado. Hoy nos aportan grandes proyectos como el boricua P.J. Ramos y el dominicano Al Horford o jugadores constrastados como los panameños Douglas y Garcés. Sin embargo, habrá que estar atento a todos esos jugadores de los cuales no tenemos ni pajonera idea: no solo Puerto Rico y Panamá, sino buenas selecciones como México, República Dominicana o Cuba que buscarán un puesto en el Torneo de las Américas y, si todo va bien, en el Mundial de Turquía. Quien sabe, igual les vemos en el podio...
Parece mentira, pero Centroamérica es la región que más fuerza ha perdido en el panorama del basket mundial. La consolidación de Asia y la mina africana, unido a la presencia de Norte y Sudamérica junto con Europa, dejan el papel al centro del continente americano como, no ya la “hermana pequeña”, sino la “tía solterona” del baloncesto. Las cosas no están bien, ninguna selección apunta alto en las últimas temporadas a nivel mundial y ahora mismo, que uno de esos equipos salga a plantar cara en el panorama internacional se antoja complicado.
Sin embargo, veo que todo puede cambiar: si aquí toda una generación surgió desde la plata de Los Angeles (que sólo Jimenez y Garbajosa pudieron ver algo de aquel partido), tenemos que pensar en que estamos ante la reacción de, por ejemplo, Puerto Rico. En 1990, una generación mágica acabó cuarta en el Mundobasket de Argentina: los grandes referentes de aquel equipo marcaron una época en el basket del Caribe y en la ACB dieron mucho que hablar. Mincy, Piculín Ortíz y Ramón Rivas fueron jugadores por los que equipos españoles gastaban una plaza de extranjero en vez de apostar por un norteamericano.
En Centroamérica hay una gran tradición de baloncesto, y no tenerles en cuenta es faltarle el respeto a ellos y a nuestro pasado. Hoy nos aportan grandes proyectos como el boricua P.J. Ramos y el dominicano Al Horford o jugadores constrastados como los panameños Douglas y Garcés. Sin embargo, habrá que estar atento a todos esos jugadores de los cuales no tenemos ni pajonera idea: no solo Puerto Rico y Panamá, sino buenas selecciones como México, República Dominicana o Cuba que buscarán un puesto en el Torneo de las Américas y, si todo va bien, en el Mundial de Turquía. Quien sabe, igual les vemos en el podio...
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1 comentario:
yo creo que Puerto Rico poco tiene que ver con el resto de Centroamérica. Es un estado asociado a EEUU y lo que tienen de basket lo tienen por ellos. NY es la ciudad más grande de Puerto Rico...
Luego, el resto son países muy pequeños. Panamá,que es el que conozco, tiene solo tres millones de habitantes. Y aun teniendo una influencia yanki que flipas no vi una sola canasta.
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